*La victoria en el Cuauhtémoc refuerza esas ilusiones de estar en la “fiesta grande” a final del torneo, mientras Lobos suma de visita y sigue en la pelea por un boleto.
Ante una pobre entrada en el dos veces mundialista estadio Cuauhtémoc, La Franja mostró lo que hace mucho tiempo no se veía en el campo –señalar que el césped era un autentico potrero- garra, inteligencia y funcionalidad.
Cosas fundamentales en un equipo de limitaciones que aspira a estar entre los primeros lugares de la clasificación. La garra se mostró en cada jugada, barridas, cuerpo a cuerpo, jugadas aéreas y demás, sin duda se ve la mano de Romano, un Puebla solido en defensa y contundente al ataque.
La inteligencia, es aquella que define las grandes jugadas, y no me refiero a los “golazos” o “jugadas de fantasía, sino a saber qué hacer con la pelota; La Franja controló los hilos del juego, en sí, fue más peligroso que Xolos, aunque los fronterizos daban ligeros chispazos de peligrosidad, pero un Villalpando confiable y una zaga, que se vio desde los primeros minutos mermada por la salida de Chávez, pero que reaccionó con la entrada de Ruvalcaba.
La funcionalidad caracterizo por jugadas a los camoteros, el ataque se centraba en Alustiza, pero Sánchez –quien anotó un golazo- era muy peligroso, aunado al colmillo de Moreno y jugadas a balón parado.
Este un Puebla muy diferente al de los últimos años, que se caracterizaba por débil, corto y timorato. Puede que a muchos fanáticos no les agrade este equipo –en cuestión de juego- pero es muy efectivo.
La esperanza es lo que muere al último, y está vez el Puebla tiene más argumentos de estar en liguilla que en torneos pasados, recuerden que en una post-temporada es mejor cerrar bien, que llegar calificado desde medio torneo.
El Dato
Desde aquí un abrazo y felicitación a Matías Alustiza porque pronto será papá, y para fortuna suya anotó y dedicó el gol a su esposa. Además resaltar la puntería del “Chavo” quien después de macar se colocó el balón debajo de la playera –asumiendo pancita de embarazada- y lanzó la pelota a la tribuna donde están las familias de los jugadores, exactamente donde se encontraba su esposa, sin duda, que tino..
Lobos y las veladoras
Sin duda la posibilidad de tener liguilla en el Olímpico Universitario están latentes y más cuando se tienen dos juegos de local y tres de visita en la agenda de La Jauría.
Por ello cualquier puntito fuera de casa es importante, y más cuando se tienen los antecedentes de ser uno de los peores visitantes del torneo.
Lobos y Correcaminos tuvieron mucho respeto, generaron pocas llegadas, donde sólo una por bando fue realmente peligrosa.
Al final “se armó la grande” en Tamaulipas donde jugadores se hicieron de palabras, donde el central amonesto a varios jugadores, dejando la baja más sensible en el banquillo universitario, cuando el nazareno expulsó a Héctor Medrano Abad, quien verá este viernes al equipo desde la tribuna.
Desde Puebla, prenderemos veladoras, tendremos la calculadora a la mano y mucha fe, para tener la “fiesta grande” en nuestros estadios, por aquí y en cada lugar del estado ¡Sólo poblano!
