Una de las garantías del fútbol es que siempre te da una revancha y que no puedes vivir de las estadísticas, sin embargo a lo largo de la historia hay una serie de antecedentes que le dan sentido a muchas cosas, si nos enfocamos en el América contra Atlante nos podemos dar cuenta de que el primero siempre ha mandado sobre el Azulgrana.
Cuando Atlante estaba en en DF, sus seguidores lo dejaron solos y es que nadie sabe lo que tiene hasta que lo ve perdido, eso también es parte de la historia.
América se ha sobrepuesto al Atlante una y otra vez, no nos hemos cansado de humillarlos y prueba de ello son que en 3 de los últimos 4 partidos se han llevado 4 goles a domicilio y de visita, dándose así una historia de paternidad.
Hablando de historia negra para el Atlante uno de los capítulos más obscuros se dio en el 2001 que tras una goleada patrocinada por el América, terminando de líderes en aquella ocasión y que también mandó al rival al descenso, donde Atlante busco una promoción y "recuperaron la categoría" aunque eso de lo que más perdieron junto con la dignidad que les quedaba y posteriormente se llevaron a Cancún.
La historia también habla de los valores inculcados algunos no conocen el agradecimiento, me refiero a Narciso Mina, si bien fue crucificado por los Cremas tras fallar una y otra vez en la más reciente final, entiendo que sea circunstancial y tener días malos, lo que no es justificable es declarar "Le anotaré al América" más aún cuando fue un equipo que le dio trabajo durante un año, institución con la cual debe estar agradecido y si eso no se lo enseñaron, hoy va a aprender lo que es grandeza, que la talla de la playera del Atlante le queda a la medida porque esta chica, que el Estadio Azteca late, y que al rival siempre le va a pesar, aunque nunca en la historia de su vida se encontrará algo más pesado que portar la playera del equipo más grande de México, el club América.
