FIESTA POPULAR EN MÉXICO TRAS GOLEADA CONTRA NUEVA ZELANDA

 

MEXICO, 13 nov (Xinhua) -- El triunfo de la selección mexicana de fútbol por un marcador de 5-1 en el juego de ida contra el cuadro de Nueva Zelanda desató, hoy miércoles, en las principales ciudades del país, una fiesta popular: desde el presidente Enrique Peña Nieto hasta los fanáticos de todas las edades dejaron brotar su frenesí.
En su cuenta de Twitter, el mandatario mexicano escribió: "¡Muchas felicidades a @miseleccionmx por esta gran victoria! Mantengan la misma pasión y esfuerzo en el próximo partido".
En un segundo mensaje, Peña Nieto afirmó que los integrantes de la selección mexicana son orgullo para los mexicanos y que la confianza en ellos mismos permitió la victoria.
El seleccionado mexicano goleó este miércoles al de Nueva Zelanda, en un partido de repesca realizado en el Estadio Azteca, ubicado en el sur de la capital mexicana, y rumbo al mundial de Brasil 2014.
Al anotar el equipo mexicano el primer y segundo goles a los minutos 31 y 39, respectivamente,  la histeria de los aficionados locales al balompié se desató en las diferentes cantinas locales, a las cuales asistieron esta tarde para ver un triunfo que, según algunos comensales, ya se presentía.
En esos minutos, todos los clientes de esos centros de convivencia se levantaron de las mesas entre aplausos y gritos de júbilo, como si México ya tuviera su pase al máximo encuentro futbolero en tierras brasileñas.
Ahora, sólo queda esperar el próximo partido entre ambas escuadras, que se realizará el próximo 20 de noviembre en el estadio neozelandés de Wellington. Por ello, ese medio boleto para poder ir al mundial de Brasil el próximo año se podría desvanecer y truncar las esperanzas de millones de mexicanos.
Al respecto, el técnico de la escuadra tricolor, "El Piojo" Herrera, declaró a una televisora local, tras el arrasante triunfo mexicano, que "no hay que echar las campanas al vuelo", es decir, no hay que cantar victoria, porque Nueva Zelanda no es el flan que todo mundo espera.
Pero la mayor fiesta popular se vive en los alrededores del Angel de la Independencia, uno de los principales íconos de la capital mexicana, que fueron abarrotados por miles de fanáticos del fútbol.Con el grito desgarrador de "¡Piojo, piojo, piojo...!", las andanadas de mexicanos caminaron por las arterias circunvecinas de ese monumento a la Independencia de México.
Niños montados en los hombros de sus padres, automovilistas accionando los cláxones de sus automóviles y vendedores de bebidas gaseosas y todo tipo de frituras que aprovechan la euforia de los fanáticos presentes en el Angel de la Independencia.
En el corazón de la avenida Paseo de la Reforma, los gritos de vivas y honores a "El Piojo" Herrera parecen disminuir los efectos del intenso frío, casi gélido, que, acompañados con ráfagas de vientos superiores a los 25 kilómetros por hora, no hacen mella a los ahí presentes.
Cientos de policías de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSPDF, Ciudad de México) fueron asignadas, unos para resguardar ese y otros  monumentos históricos, y otros para agilizar el tránsito vehicular.
Pero los integrantes del equipo tricolor mexicano y su crecido técnico de ninguna manera deberán de sentirse con los dos pies en Brasil, ya que aún falta el principal paso y demostrar que, efectivamente, la zaga mexicana tiene los tamaños como para volver a derrotar de manera contundente al cuadro neozelandés, y así hacerse acreedor al mundial de Brasil 2014.